Ayer llegué a casa y se levantaba un buen viento, no entrené, hoy estaba lloviendo y tampoco entrené. En resumen que me está costando entrenar, que la motivación ya no es la misma.
El domingo me atreví a correr el regional de carretera, digo me atreví porque los dos días anteriores tuve una diarrea impresionante. La primera medio comida que me sentó, fue la del sábado y la cena un poco mejor pero por la mañana también fui al baño. Así las cosa me presenté en Arenas de Iguña con un calor sofocante. Los primeros 40 kms se me hicieron durísimos y unas cuantas veces pensé en la retirada, eso sí salí a unos cuantos ataques. A partir de ahí fui mejorando pero ya había gastado muchas fuerzas y luego nos tocó tirar al equipo para intentar neutralizar una escapada. Yo tiré hasta donde me dieron las fuerzas, luego me metí en lo poco que quedaba de pelotón y hasta meta. Ni tan mal, unos escapados por delante y luego el pelotón nuestro, por detrás un reguero de corredores y un montón de retirados en una carrera que se hizo durísima por el calor. Como siempre, contento y disfrutando.
La próxima casi seguro que será en Puentenansa pero para eso hay que entrenar un poco.
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